PLAN FINANCIERO
Los planes financieros son estrategias organizadas escritas para mantener la
salud financiera y lograr los objetivos financieros. Desarrollar un plan financiero
no solo permitirá controlar tu situación financiera sino también puede realzar
la calidad de vida reduciendo la incertidumbre que se siente sobre los asuntos
relacionados con el dinero y las necesidades futuras. La mayoría de los
expertos en planificación financiera recomiendan seguir un proceso para
desarrollar un plan sólido para el futuro de tus finanzas:
1. Determinar la situación
financiera (hacer un diagnóstico) Hacer una
lista de los activos y pasivos, para calcular el patrimonio neto actual, que
será el punto de partida. Tener un expediente financiero y así monitorear
gastos e ingresos.
2. Desarrollar los
objetivos financieros (proponerse una meta
utilizando la estructura S.M.A.R.T. –Specific, Medible, Alcanzable Relevante y
Tiempo limitado-). Establecer objetivos a corto, mediano y largo plazo. Es
decir, considerar cómo se quiere vivir la vida a futuro. Es importante que el plan
personal se convierta en plan familiar, para así tomar decisiones financieras.
3. Identificar planes de
acción alternativos (organizar información). Un
mismo objetivo puede complicarse en el camino, por lo que es importante
considerar si se debe seguir, considerar, cambiar, o emplear un nuevo plan de
acción, y así determinar si un objetivo tendrá impacto en otro, y qué prioridad
debe de darse.
4. Evaluar alternativas. Seleccionar las estrategias para implementar o crear el
plan financiero, involucrando costos de oportunidad, es decir, renunciar a un
gasto para poder tomar una decisión con miras al cumplimiento del objetivo o
meta. La incertidumbre siempre estará presente al correr el riesgo de la
inversión, por lo que las decisiones que se tomen deben de ser analizadas
cuidadosamente, aunque se corran riesgos.
5. Crear e implementar el
plan financiero. Considerar la situación
actual y empezar a pensar cuáles objetivos serían más realistas. Por ejemplo:
pagar una deuda puede convertirse en una inversión, pues al reducir la deuda se
reducen también los cargos por intereses que a lo largo se vuelve una situación
apabullante e interminable. Es importante que los objetivos y metas vayan
creciendo de forma gradual para que sean alcanzables. Se debe destinar un
presupuesto para alcanzar dichas metas enfocado específicamente en ello.
6. Revisar y corregir. Planificar es un proceso. La vida es un proceso cambiante por
lo que el plan financiero se debe actualizar en medida de las circunstancias o
de que los objetivos cambien, por lo que hay que revisarlos constantemente.
De acuerdo
a Quintero (2009), el plan financiero es el instrumento que manifiesta lo que
se quiere hacer en un futuro, que considera el incremento esperado las opciones
de financiamiento e inversión y lo factible entre objetivos y metas.
Es
importante plantearse dónde se encuentra financieramente la persona, cuánto
ahorra, qué es lo que se quiere conseguir en el futuro inmediato, con cuánto
presupuesto cuento para complementar el proyecto de vida y carrera, y así
considerar las ventajas de un pan financiero que beneficie a la familia y
alcanzar cierta calidad de vida.
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